En este momento estás viendo GMVM inicia el Mes Violeta con Misa Solemne por víctimas de femicidio
Screenshot

GMVM inicia el Mes Violeta con Misa Solemne por víctimas de femicidio

Fe y Sororidad: el llamado del Mes Violeta por las víctimas de femicidio y la paz en Palestina

(Caracas, 03-11-2025.Prensa Minmujer).— La Gran Misión Venezuela Mujer (GMVM) dio inicio al Mes Violeta con una emotiva misa solemne en conmemoración de las víctimas de femicidio. El acto, cargado de profundo sentimiento y solidaridad, se llevó a cabo en el Salón Las Heroínas de la sede del Ministerio del Poder Popular para la Mujer y la Igualdad de Género (Minmujer). La jornada fue también un firme llamado a la Paz Mundial y una muestra de respaldo a las mujeres que enfrentan diversas formas de violencia, con una mención especial a aquellas afectadas por conflictos armados, como el que atraviesa Palestina.

La ceremonia religiosa fue dirigida por el Padre Omar Gómez, quien inició la misa agradeciendo a los presentes y elevando un llamado a la conciencia para erradicar la violencia. El Padre Gómez enfatizó que la violencia es prevenible y que la educación es una herramienta fundamental en esta lucha. Dirigió un mensaje de apoyo y aliento a todas aquellas mujeres que han sufrido algún tipo de violencia, y transmitió un mensaje de solidaridad a la mujer palestina.

La ministra del MinMujer, Yelitze Santaella, destacó la importancia de fusionar la gestión con la espiritualidad en esta lucha:

«Hoy iniciamos el Mes Violeta con esta misa solemne, una caricia para el alma que tantas mujeres en Venezuela y en el mundo necesitan. Desde la Gran Misión Venezuela Mujer, ratificamos nuestro compromiso de seguir amándonos y abrazándonos en esta lucha por la vida y la paz, convocando a ser cada día más humanos, más amorosos y más solidarios con todas las mujeres que, con dignidad y coraje, llevan sobre sus hombros la defensa de la Patria.»

Un testimonio de superación

La señora Amada Jiménez, madre de una víctima de femicidio, compartió un testimonio conmovedor de superación y agradecimiento, convirtiéndose en un símbolo de la fuerza y la esperanza que inspira la misión:

“Como madre de una víctima de femicidio, doy gracias por esta misa que no solo es por nuestras hijas, sino también por las familias víctimas. Es un llamado a la paz y a ser más humanos. Yo agradezco todos los días y mi manera de pedir es agradeciendo. Agradezco la oportunidad de tener este espacio de espiritualidad que nos llama a la reflexión y a la acción. Nuestro llamado es a seguir amándonos y a abrazarnos en la fe y la esperanza.”

La misa culminó con un compromiso colectivo de seguir trabajando en el territorio por los derechos de la mujer y en contra de toda forma de violencia, reafirmando el papel protagónico de las mujeres en la construcción de un país más justo y pacífico.

(Fin/ Melanie Navas)